Dificultades relacionadas con abusos sexuales.
Apoyo a personas inmersas en relaciones abusivas o de maltrato.
Problemas con la autoestima y/o la imagen corporal.
Miedo a la intimidad.
Dudas con respecto a la identidad sexual.
Dificultades por gustos eróticos, (las denominadas “parafilias”).
Enriquecimiento erótico (individual y de pareja).
Afrontar la educación sexual de los hijos y las hijas. Orientación a padres.